Qué maravilloso puede ser el verano cuando lo disfrutas en un lugar como Ibiza. Y de entre todos los rincones que encontramos en esta encantadora isla, Sant Josep de sa Talaia es el que cuenta con más kilómetros de costa para disfrutar del buen tiempo que se respira en esta época del año.
Te proponemos cuatro de las playas más imponentes de esta zona para que encuentres tu porción de arena donde establecer tu pequeño paraíso particular, porque, con una hamaca, un poco de sol y un chapuzón ¡el verano se convierte en una gozada!
Playa de Cala Tarida
Visitar esta playa es la mejor opción para los que buscan una experiencia de lo más completa. Sus múltiples chiringuitos y restaurantes, la variadas actividades náuticas que aquí puedes practicar o los muchos rincones escondidos por visitar son algunos de los alicientes que la convierten en un lugar único. Cala Tarida cuenta con una playa principal y con varias calas pequeñas que se esconden bajo los acantilados colindantes, algunas incluso, cuentan con sus propias casetas varadero que tanto encanto le dan. Una vez elijas el rincón donde instalarte, simplemente disfruta de sus plácidas aguas y cuando caiga la tarde, nada mejor que despedir el día con un buen cocktail en cualquiera de las terrazas que se ubican en el acantilado para disfrutar mejor de las vistas y del mejor ambiente.
Playa de Cala d’Hort
Qué decir de Cala d’Hort y su imponente paisaje. Esta fascinante playa es la mejor de todas para admirar el famoso islote de Es Vedrà, siempre acompañado de Es Vedranell, uno de las estampas más icónicas de Ibiza. Cala d’Hort es una playa de aguas cristalinas y bellas casetas varadero que la custodian a ambos lados y donde disfrutar de la mejor gastronomía marinera. Éste es de esa clase de lugares donde simplemente con disfrutar del horizonte sentirás que habrá valido la pena la visita y si lo haces al atardecer, seguro que acabarás por enamorarte de este rincón por completo. ¡No olvides rematar la jornada con una buena paella al estilo ibicenco en cualquiera de sus restaurantes!
Playa de Es Bol Nou
Dirigiéndonos al sur encontramos una de las playas más curiosas de la isla pues sus aguas son cristalinas gracias a su blanca arena pero los acantilados que la arropan son de arcilla roja, una curiosa mezcla cromática que da lugar a un paisaje de lo más pintoresco. Se trata de la playa de Es Bol Nou, un lugar plácido con poca profundidad donde pasar un relajante día junto al mar. Pero aquí no sólo podrás disfrutar del sol y la arena pues tras los acantilados, encontramos el antiguo asentamiento fenicio de Sa Caleta, el primero de la isla y una porción vital de la historia de la isla. Junto a él, también se halla el puerto natural de Sa Caleta, repleta de casetas varadero que aún hoy en día cuentan con algún que otro pescador que sale a faenar, una de las imágenes más típicas de la Ibiza auténtica.
Playa de Cala Comte
Cala Comte es sin duda una de las mejores playas del poniente ibicenco. Su infinidad de rincones variados donde situar la toalla y sus aguas turquesas son su mejor tarjeta de presentación para pasar un día de sol y playa único. Pero si además, le sumamos los bellos islotes que decoran el horizonte y la privilegiada posición que goza este lugar para contemplar la puesta de sol, está claro que esta playa no puedes dejar de visitarla durante tu estancia en Ibiza. El atardecer tras els Illots de Ponent mientras disfrutas de un baño en el mar será la guinda perfecta para un día increíble junto al mar.
